Si el cine costarricense está apenas asomando el ojo por la cueva donde se encuentra guardado, una serie televisiva de origen nacional está enterrada bajo el magma del centro de la tierra. Incluso con la prometida Dele Viaje (que siguen buscando patrocinadores) no ha podido mostrarse ni siquiera a los que, eventualmente, podemos recomendarla.
¿A qué se debe esto? Mientras que la respuesta más lógica sería dinero, yo lo veo más como un problema de audiencia. El público tico es poco exigente y es entretenido con cualquier "tontera" que se cruce por la pantalla. Claro es el ejemplo los concursos de canto y baile que tiene el canal más visto del país. Además de ser una burla con los participantes que no se les puede tomar en serio, la calidad técnica es muy baja; alguien me comentó que la alta definición de ese canal era mejor que en otros países de latinoamérica, pero eso no le quita la poca creatividad que se tiene con respecto al dinamismo y contenido de los programas en general.
Aquí vuelve el tema del dinero y la excusa de que con pocos recursos no se puede montar algo tan espectacular como American Idol. FALSO. Con un mínimo de capital se puede llegar a crear maravillas que sólo necesitan de un poco de creatividad básica, sean programas con guión o en vivo. No digo que no sea beneficioso para la producción pero es lo que se quiere mostrar -entre otros factores- lo que importa. El caso perfecto es una serie que estrenará en julio que nos da el lado verdadero y crudo de la vida, lo logra con perfección sin un solo efecto especial o escenario extravagante (esa está para ser analizada aquí pronto). Pero menciono una producción ajena a nuestro país porque no me es posible dar otro ejemplo nacional, no hay. La cosa es que no existe una mentalidad que conozca algo más. Igual que en el cine predomina el cine gringo de acción, en tele, la gente prefiere ver, por un margen muy grande, "reality shows".
¿No hay público para una producción de guión nacional? Se busca y se va formando poco a poco. Es sí, haría falta una mente creativa que se atreva a dar a conocer sus ideas y sea apoyado por algún canal para salir adelante con el proyecto. De no ser el caso y se prefiere seguir con los programas que son conocidos y populares, una revisión y replanteamiento de los aspectos técnicos y creativos no vendría mal. Esa cámara estática lo duerme a uno. ¿Por qué insisto en esto? El ver televisión puede ser más que un simple escape, pero ese es tema de otro día.
Rescato Quién quiere ser millonario. La fórmula es conocida y repetida todas las semanas, pero el contenido y el presentador lo hacen tan ameno que la hora pasa sin darnos cuenta.
Y los que estaban pensando en La Pensión, es un comercial de media hora que no vale la pena ni mencionar.