miércoles, 25 de diciembre de 2013

Las mejores series del 2013

Siempre me han gustado las listas de de fin de año. En diferentes sitios de internet aparecen todo tipo de rankings que pueden ir desde lo más simple y conocido hasta cosas que uno ni se imaginaba. Aquí, en El Hablador de Tele vemos infinidad de series, pero solo la mitad salió al aire en latinoamérica, así que esta lista se basa en esas que llegaron a la pantalla de televisión propiamente. Con una excepción, porque Netflix decidió entrar a la competencia de producir series originales, para alegría de muchos y molestia de otros. El último y primer puesto fueron los más fáciles de decidir, el resto me costó muchísimo enumerar. Al final, espero que encuentren alguna que ya hayan visto o les despierte la curiosidad de ver alguna desconocida. ¡Feliz año nuevo!

10. Scandal No hay otro programa que tenga tantos giros y sorpresas como este. Pero dentro de sus locuras narrativas, hay campo para los personajes y sus reacciones a los eventos que se van desarrollando; no hay ritmo tan apresurado en televisión como el de Scandal que, a la misma vez, logre dar un buen entretenimiento semanal.

9.Orange is the New Black La mejor producción original de Netflix. Hay que verla para creerlo.




8.New Girl Con mucha discreción, Nick y Jess ahora son pareja y no podía ser mejor. La dinámica y química entre los dos es fórmula para dar excelente comedia y situaciones incómodas que encantan al televidente. 



7.Game of Thrones Fue apenas este año que descubrí la calidad de la adaptación. Mientras que la segunda temporada estuvo mejor construida que la primera, pero le faltó el elemento emocional, el tercer año logra abarcar el avance en la historia junto al crecimiento de sus personajes. Con buenos diálogos y una costosa producción evidente en la pantalla, además de la trágica "Boda Roja" que estremeció a todos, Game of Thrones merece su reconocimiento. 
6.The Americans En la casa de Elizabeth y Philip Jennings hay más que una familia norteamericana común. Sin mencionar de dónde son una sola vez, los espías rusos colocados como matrimonio durante la guerra fría mantienen historias semanales y una constante: la relación entre sus dos personajes principales que se desmorona emocionalmente pero debe mantenerse unida por "amor a la patria". Con actuaciones sutiles pero "al dente", The Americans sabe lo que hace, y lo hace bien.


5.Hannibal La calidad de imagen en Hannibal no se puede ignorar. Su saturación de colores la hace hermosa de ver, a pesar de su oscura temática; pero es la mente de Will Graham que más llama la atención, sus frustraciones son fascinantes y el punto alto del programa, lo que le da un balance atractivo y razón suficiente para ver, de nuevo, una historia que ha sido contada infinidad de veces. Esta vez, en manos del siempre creativo Bryan Fuller. 
4.Masters of Sex El estudio de la sexualidad humana no había sido tratado con tanta elegancia; entre los altibajos emocionales del mismo doctor Masters, hasta la excelente dinámica que se fue formando entre los diversos personajes. Con un tono constante y apropiado para la época y con actuaciones excelentes (sobretodo de los secundarios Beau Bridges y Allison Janney), es la mejor nueva serie del año y de las que más se ha disfrutado, aquí en el blog.

3.Breaking Bad A pesar de que varios episodios de la segunda parte de la temporada final no calzaron bien o se sintieron demasiado apresurados para llevar la trama al siguiente punto, no se puede negar la calidad artística de la serie. Siempre fiel a sus personajes y con el honor de mejor episodio del año que se sintió como el verdadero final de la serie, lo demás fue como un epílogo trágico.


2.The Good Wife ¿Qué hace una serie de abogados cínicos tan alto en la lista? Simple: el guión, las actuaciones, el montaje, la música renovada y la re invención de sus historias al poner a sus personajes principales en lados opuestos de la corte.
1.Enlightened En una época donde el mundo de las series es dominado por el "antihéroe" (principalmente masculino) y la empatía hacia acciones que, generalmente, no realizaríamos o desaprobaríamos al instante, Enlightened aparece y nos ofrece al héroe que menos esperamos. Amy Jellicoe no es un personaje agradable, sus acciones pueden llegar a ser irritantes e irrespetuosas; pero hace bien. Aunque es llevada por un deseo de querer traer abajo a la compañía que la maltrató, es, al fin y al cabo, una buena acción. Las actitudes de Amy afectan a todos aquellos que la rodean y, a la vez que ellos cambian, ella aprende y crece emocionalmente, conservando su personalidad extrovertida e impertinente. Porque tiene un final tan perfecto para tan poco tiempo, no solo es una segunda (y lastimosamente última) temporada de ocho episodios majestuosamente filmada y escrita (todos por su creador, Mike White), sino la mejor cohesión de ocho episodios que se vieron este año.


Peor: Hostages
Decepción más grande, buen final: Homeland
Series que difícilmente llegarán a latinoamérica pero vale la pena buscar (o no me di cuenta que salieron al aire en algún canal):
--Orphan Black(Canadá)
--Rectify
--Please Like Me(Australia)
--Les Revenants(Francia)
--Top of the Lake

Mejores episodios:
1."Ozymandias" -Breaking Bad
2."Agent of Change" -Enlightened
3."Hitting The Fan" -The Good Wife
4."The Ghost is Seen" -Enlightened
5."The Rains of Castamere" -Game of Thrones
6."One Man's Trash" -Girls
7."Savoureux" -Hannibal
8."The Captain" -New Girl

lunes, 9 de diciembre de 2013

The Good Wife





Es una tragedia que no he hablado suficiente de esta serie aquí en el blog. Una pequeña recomendación no bastaba para explicar los detalles que esta serie lograba tan bien en sus primera temporadas. Ahora, con diez episodios de su quinto año transmitidos, se ha convertido en más que una simple serie de abogados muy ingeniosos. 
Desde sus inicios, el matrimonio de creadores, Robert y Michelle King, plantearon un programa donde el personaje principal siempre sería el cinismo de todos los involucrados en la firma de abogados Lockhart & Gardner y sus opositores en corte. Pero es al final de su cuarta temporada y prácticamente todos los de la actual que llega a un altísimo punto de calidad en cuanto a contar historias y mantenerse fiel a los personajes principales y recurrentes
Cuando Alicia y Carey deciden dejar el lugar que los acogió por cuatro años para formar un bufete propio, donde no estuvieran bajo el ala de quienes se llevaban todo el crédito de su trabajo. Todo esto sucede con los riesgos que se puedan esperar y con las implicaciones del caso: cuando Will se da cuenta y decide despedir a Alicia, cada escena de esos primeros quince minutos (del episodio cinco, donde todo se viene abajo) es electrizante; amistades de años se vienen a bajo en segundos, discusiones que temíamos se vuelven realidad y no hay nada que podamos hacer para detenerlo. Esta es la cosa: no es posible escoger un lado en el cual estar, no solo queremos que Carey y Alicia triunfen, sino que tampoco queremos ver a Will y Diane molestos, ellos han sido sus mentores, y, por extensión, los nuestros. Esa es la maravilla de esta temporada --y lo que necesita cualquier serie que lleva tanto tiempo al aire--, un cambio en el status quo que revitalice a todos los involucrados y a nosotros, los espectadores. Así, la atención vuelve y la serie no vuelve a ser la misma, pero en este caso, es más que excelente.
Además de los geniales cambios y nuevas dinámicas que ayudarán enormemente a la fórmula semanal, The Good Wife siempre fue excelente para diálogos, construcción de personajes y manejo entre historias individuales y con continuidad, siendo la relación entre Will y Alicia la más importante (en su segundo año fue tensión, amorío en la tercera y separación en la cuarta), cómo se convierte un amor tan incondicional en traición y engaño de un momento a otro, esto se explora mejor en el episodio diez, donde Will intenta utilizar los momentos que estuvo con Alicia para ganar un caso en corte. Lo mejor es que, entre el excelente drama, los escritores siempre logran encontrar momentos de humor que se entremezclan con los sucesos generales, para darles un mayor realismo.
El aspecto que más ha evolucionado y llamado la atención este año es la música, las melodías de David Buckley se volvieron más atrevidas y notorias gracias a los giros dramáticos y mayor libertad a la hora de componer, dignas de escuchar. También lleva mención honorífica la dirección que resulta de las más atrevidas para programas así.
No me queda otra cosa más que recomendarla de nuevo. Si no la han visto antes, empiecen con esta temporada, funciona como un nuevo inicio sin necesidad de historias pasadas (aunque para los que vimos desde el principio, el impacto es mayor) y contiene uno de los mejores episodios que ha producido la serie ("Hitting the Fan") y, sin duda, uno de los mejores del año.
Esperemos que The Good Wife siga impresionando a sus fieles seguidores y a los que, por la bulla que ha hecho este año, apenas nos empiezan a acompañar, que han sido bastantes.